El Volkswagen Polo BlueGT es el Polo de gasolina que menos carburante gasta y el segundo más potente —tiene 140 CV— tras el Polo GTI. Estará disponible en España desde noviembre de 2012. De momento no hay precio definitivo, pero la previsión de Volkswagen España es que sea entre un 15 y un 20% más económico que un Polo GTI (180 CV).
El consumo medio homologado es 4,5 l/100 km con el cambio automático «DSG» (de doble embrague). Con el manual, aumenta hasta 4,7 l/100 km. Actualmente, no hay a la venta en España otro turismo con motor de gasolina, de tamaño y potencia semejante que gaste parecido.
El motor del Polo BlueGT tiene 1,4 litros de cilindrada, está turboalimentado y da 140 caballos. No es el mismo 1.4 TSI que Volkswagen lanzó en 2007 al mercado, sino el que estrenó el nuevo Audi A3.
Una de las claves para que el consumo sea bajo es que tiene un sistema que puede desconectar la alimentación en dos de los cuatro cilindros. Según Volkswagen, el Polo BlueGT puede hacer aproximadamente el 70% del recorrido de consumo homologado en dos cilindros. Por el contrario, en condiciones reales de utilización, no es normal circular tanto tiempo en dos cilindros.
La desconexión de cilindros solo se produce cuando la solicitud de fuerza es muy baja. En carreteras llanas es posible circular a velocidad constante (hasta unos 130 km/h) en dos cilindros. También es posible ganar velocidad, pero para ello la aceleración tiene que ser extremadamente lenta y difícilmente compatible con una conducción fluida en una carretera abierta al tráfico.
La desconexión de cilindros funciona con gran suavidad. El conductor casi no se percata de cuándo funcionan dos o cuatro. Prestando mucha atención sí se puede distinguir que en dos cilindros el sonido es ligeramente distinto (de menor frecuencia) y, quizá, se pueden sentir unas vibraciones tenues en el volante. El conductor sabe en todo momento cómo está funcionando el motor porque aparece una indicación en la instrumentación.
Por autopista, a una velocidad sostenida de entre 90 y 100 km/h, casi sin cambios de ritmo, el consumo que indicaba el ordenador era 5,0 l/100 km, que me parece un dato bajo. Con constantes cambios de ritmo (por ejemplo al salir de las rotondas, cruces y de las localidades), el consumo fue 6,5 l/100 km. En autopista la desconexión de cilindros funcionó durante mucho más tiempo que en cambios de ritmo. El Polo BlueGT también tiene arranque y parada automática del motor durante las detenciones.
Con el Polo BlueGT se tiene un coche que puede gastar relativamente poco carburante a velocidad constante y moderada, pero también uno muy rápido. Su motor tiene un funcionamiento sencillamente sensacional porque tiene mucha fuerza en toda la gama de revoluciones. Es de esos motores que se pueden disfrutar en marchas largas aprovechando el gran empuje que siempre hay disponible y también apurar hasta un régimen algo porque lo alcanza con rapidez y con mucha fuerza.
La suspensión del Polo BlueGT es dura y deja la carrocería 15 mm más cerca del suelo que la de un Polo convencional. Con esa suspensión los baches se notan con claridad. Quizá es demasiado firme para quien espere un coche cómodo, que transmita poco las irregularidades del piso. A cambio, el Polo BlueGT tiene un ligero tacto deportivo que no se encuentra en los Polo menos potentes con la suspensión de serie. Entre que la suspensión es firme y que las prestaciones son buenas, el BlueGT puede ser una buena alternativa para quien quiera un coche rápido, per no necesite los 180 caballos del GTI.
El Polo BlueGT tiene un equipamiento y aspecto específicos. Algunos detalles de la carrocería están tomados del modelo GTI (como el alerón de la parte final de la carrocería y los paragolpes, el posterior con difusor de aire) y otros de los modelos BlueMotion (como las estriberas de los laterales). Las llantas son de 17" de diámetro y los neumáticos 215/45 R17, es decir, no son especialmente estrechas (para lo que quizá se podría esperar de un modelo de bajo consumo.
En el interior, lo más distintivo de esta versión son unos asientos específicos que dan buena sujeción lateral y van tapizados en tela y piel. Lo único que me parece mejorable de estos asientos, al igual que los del resto de modelos de la gama, es que los reposacabezas quedan algo lejos. También hay piel guarneciendo parte de la cara interior de las puertas y el interior.
Fuente: www.km77.com
El consumo medio homologado es 4,5 l/100 km con el cambio automático «DSG» (de doble embrague). Con el manual, aumenta hasta 4,7 l/100 km. Actualmente, no hay a la venta en España otro turismo con motor de gasolina, de tamaño y potencia semejante que gaste parecido.
El motor del Polo BlueGT tiene 1,4 litros de cilindrada, está turboalimentado y da 140 caballos. No es el mismo 1.4 TSI que Volkswagen lanzó en 2007 al mercado, sino el que estrenó el nuevo Audi A3.
La desconexión de cilindros solo se produce cuando la solicitud de fuerza es muy baja. En carreteras llanas es posible circular a velocidad constante (hasta unos 130 km/h) en dos cilindros. También es posible ganar velocidad, pero para ello la aceleración tiene que ser extremadamente lenta y difícilmente compatible con una conducción fluida en una carretera abierta al tráfico.
Por autopista, a una velocidad sostenida de entre 90 y 100 km/h, casi sin cambios de ritmo, el consumo que indicaba el ordenador era 5,0 l/100 km, que me parece un dato bajo. Con constantes cambios de ritmo (por ejemplo al salir de las rotondas, cruces y de las localidades), el consumo fue 6,5 l/100 km. En autopista la desconexión de cilindros funcionó durante mucho más tiempo que en cambios de ritmo. El Polo BlueGT también tiene arranque y parada automática del motor durante las detenciones.
La suspensión del Polo BlueGT es dura y deja la carrocería 15 mm más cerca del suelo que la de un Polo convencional. Con esa suspensión los baches se notan con claridad. Quizá es demasiado firme para quien espere un coche cómodo, que transmita poco las irregularidades del piso. A cambio, el Polo BlueGT tiene un ligero tacto deportivo que no se encuentra en los Polo menos potentes con la suspensión de serie. Entre que la suspensión es firme y que las prestaciones son buenas, el BlueGT puede ser una buena alternativa para quien quiera un coche rápido, per no necesite los 180 caballos del GTI.
Fuente: www.km77.com
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